Hernando de Talavera

Breve forma de confesar (c. 1496)

Fraile jerónimo natural de Talavera de la Reina (Toledo), fue hombre de confianza de los Reyes Católicos, confesor de la reina y primer arzobispo de Granada.

No escribió sobre mnemotecnia, pero en sus obras sí encontramos de vez en cuando de algún sencillo recurso mnemotécnico para ayudar al lector a recordar sus palabras. Por ejemplo, en el título Breve forma de confesar vemos el siguiente acrónimo:

Pueden ser retenidas estas diez maneras de accidia y tibieza ó de pereza, por este vocablo tisicupero, en el cual son diez las letras, entendiendo por cada letra una manera. Por la t tardanza; por la i, inquietud; por la s, sueño; por la segunda i inconstancia; por la c, curiosidad; por la v, verbosidad, que el parlería; por la p, porquedad de corazón; por la e, evagación del pensamiento; por la r, rancor; por la o, ociosidad.

O poco más adelante:

Todas estas veinte y una maneras de sobervia se pueden retener ligeramente por este verso: Vim cippi dissipabit; dica dilacerata. En el cual verso cada letra da á entender una manera de sobervia, excepto la letra m de aquella primera palabra vim, que no da á entender ninguna manera de sobervia, ni tampoco la da á entender letra alguna de aquella palabra postrimera dilacerata, ca se pusieron por cumplir el verso y no por dar á entender manera alguna de sobervia.

Estos detalles nos hacen pensar que el arte de la memoria debió ser por aquellos tiempos, si bien no una materia reglada, sí algo habitual entre quienes tenían cierta formación académica.

Bibliografía

La obra arriba citada, junto con otros textos, la encontramos en:
MIR, Miguel (ed.). Escritores místicos españoles, tomo I. Madrid: Bailly-Bailliére, 1911.